Las empresas necesitan invertir en bienes tangibles (ordenadores, redes, servidores, software) para ser digitales, pero ese es sólo el comienzo de cualquier proceso de digitalización o innovación, ya que ante todo necesitan contar con líderes que aprovechen y sitúen al talento al frente con el apoyo de la tecnología.
De hecho, un reciente artículo del Harvard Business Review defiende que la digitalización de toda compañía ha de desarrollarse a lo largo de los siguientes tres estadios:
- Infraestructura digital
- Herramientas digitales
- Líderes digitales
La justificación de ello reside en que todo proceso de transformación digital conlleva una serie de decisiones ligadas al ser humano y que afectan a todos los stakeholders que forman parte de una compañía.
Por ello, el informe del Harvard Business Review afirma que, en último término, las compañías necesitan de líderes digitales capaces de dirigir equipos, detectar prioridades y acercar la tecnología a las personas.
Infraestructura digital
La adquisición o contratación de equipos y servicios IT afecta ya a cualquier industria y especialmente de forma integral (ver gráfico) a la tecnológica, al sector finanzas, seguros o a los medios de comunicación.
Por el contrario otros sectores, como el farmacéutico -vía automatización- o el de gran consumo -mediante nuevas formas de relación con los clientes-, por citar dos ejemplos; tienen un amplio margen de crecimiento en torno a la tecnología.
Si hay algo cierto es que lo digital ha creado ya una brecha exponencial entre aquellas compañías que son digirati y las que no: de hecho, las empresas de la economía estadounidense que lideran sus respectivos sectores son hasta 13 veces más digitales que sus rivales.
Herramientas digitales
La utilización de servicios telemáticos de pago, de marketing digital, de plataformas ecommerce o de centralización de compras son sólo algunas de las herramientas que están permitiendo ser líderes a varias empresas en sus respectivos campos.
Gracias a ellas son más ágiles, productivas, innovadoras o conectan mejor con sus clientes, independientemente de que sus negocios se sustenten sobre activos propios o ajenos, como es el caso de algunos modelos de la economía colaborativa tipo Uber o Airbnb.
Líderes digitales y talento
Como ya hemos dicho, los líderes digitales son el eslabón más importante de la digitalización, pues son quienes conectan las herramientas digitales y las personas (equipos propios, clientes…) de cara a incrementar la productividad y los beneficios.
En ellos reside además el identificar prioridades digitales para la transformación de su negocio y mantener a su vez la competitividad en el presente. También el saber gestionar equipos y el detectar oportunidades y perfiles profesionales que sobresalgan en ‘la arena digital’.
Como ya comentamos, la crisis de talento digital es una de las mayores lacras a las que se enfrenta una empresa en su proceso de transformación digital.
Ante ello, muchas de ellas recurren a fichar talento externo, mientras que otras deciden apostar por destapar el talento disponible -y a veces oculto- dentro de la casa mediante herramientas de trabajo colaborativo, que fomentan la innovación, el intraemprendimiento o la detección, gracias a la escucha activa de lo que los empleados dicen, de perfiles con recorrido digital.
Se trata de una apuesta integradora: los líderes digitales marcan la agenda y transmiten a los suyos una visión global, participativa e implicadora.
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